viernes, 21 de septiembre de 2012
Bonsai de Palo Borracho
- Palo borracho
- Descripción: El Palo borracho comprende dos especies principales como bonsái:
Chorisia insignis (flores amarillas). Palo borracho amarillo.
Chorisia speciosa = Ceiba speciosa (flores rosas). Palo borracho rosado.
- Chorisia insignis es muy parecida a Chorisia speciosa, lo que provoca que en muchas ocasiones se confundan. La diferencia más notable es el color de la flor.
- El Palo borracho es un árbol caduco.
- Pierde las hojas durante el periodo seco, y normalmente florece y fructifica durante esa misma época.
- El tronco está cubierto de gruesas espinas cónicas muy características.
- Posee una forma que asemeja a la de una botella, de ahí que también se le denomine Árbol botella.
- Crecimiento rápido.
- Floración llamativa y prolongada, en primavera y el verano e incluso el otoño, dependiendo de cada ejemplar, es caprichosa.
- Generalmente posee un sólo tronco, pero si por alguna razón su tronco se seca (por ejemplo, debido a temperaturas demasiado frías) la base del tronco emite nuevos brotes que pueden originar varios troncos.
- El Palo borracho es ideal para principiantes porque es fácil de conseguir desde semillas, crece rápido y es muy resistente.
- Estilos:
- Se adapta mejor a los estilos verticales, preferentemente como árbol individual pues así destacan mejor sus particularidades.
- Luz:
- En el exterior a pleno sol (excepto cuando haya heladas). Sólo florece con sol.
- Temperaturas:
- Debido a su origen subtropical, es un árbol al que no le gustan las heladas ni las bajas temperaturas, por lo que en invierno hay que protegerlo del frío en el interior de casa o en un invernadero cálido, con mucha luz.
- Puede resistir alguna pequeña helada esporádica y poco intensa (-1ºC) pero pierde las hojas.
- En las zonas de clima cálido debe cultivarse en el exterior durante todo el año.
- Substrato:
- Poco exigente con el suelo. Bien drenado.
- Mezcla de un 33% de arena gruesa o material equivalente (tierra volcánica, etc.) y 66% de mantillo.
- Riego:
- Abundante en el verano y moderado durante el resto del año.
- Los riegos deben ser a fondo hasta que salga agua por los agujeros de drenaje y cuando la superficie de la tierra comienza a secarse.
- Una vez ha perdido las hojas reducir bastante el suministro de agua.
- Nunca debemos regar un árbol cultivado en el exterior después de una helada o cuando haya riesgo de heladas.
- Abonado:
- Abonar con frecuencia especialmente durante la época de crecimiento vigoroso (primavera) y otoño; y reducir el abono en las épocas en las que detiene su crecimiento (invierno y épocas de máximo calor).
- No abonar un árbol trasplantado, hay que esperar a que brote.
- Poda:
- Debido a su vigor, se puede podar en cualquier época del año, aunque es aconsejable una poda drástica en invierno para conseguir nuevos brotes en primavera.
- Para lograr una buena ramificación es aconsejable el pinzado de las ramas (cortar las puntas), dejando brotes en la dirección que queramos su desarrollo.
- Podemos pinzar los brotes nuevos reduciéndolos a 2 ó 3 pares de hojas.
- La poda resulta más cómoda llevarla a cabo cuando el árbol no tiene hojas.
- En primavera se les puede dar forma y sanear las ramas molestas y las dañadas.
- Es recomendable que entre la poda de ramas y el trasplante (o viceversa) exista un intervalo mínimo de tiempo para no acumular demasiadas operaciones agresivas a la vez, por ejemplo, 3 semanas.
- Tras una poda fuerte tardan en recuperarse.
- Alambrado:
- Hay que tener cuidado con esta operación ya que su corteza es muy fácil de dañar y sus ramas blandas y fibrosas.
- Conviene vigilar que no se marque debido a que sus ramas engordan muy rápidamente.
- La colocación de ramas mediante el alambrado puede realizarse entre la primavera y el verano, siendo recomendable no regar el día anterior al alambrado.
- Alambrar lo justo y sólo cuando otras técnicas de modelado no puedan utilizarse o no hayan conseguido los efectos deseados.
- Por ejemplo, como sus ramas tienen una fuerte tendencia a crecer rectas y hacia arriba, una forma menos agresiva que el alambrado para abrir las ramas y formar la copa es utilizar pesas. También podemos utilizar tensores o la poda como técnica de modelado.
- Trasplante:
- En primavera cada 2 ó 3 años, en función de la madurez de la planta.
- Hay que podar las raíces durante el trasplante pero sin cortar demasiadas raíces finas para permitir que pueda recuperarlas durante el invierno.
- Sacar las raíces podridas y aprovechar a podar las ramas no deseadas.
- Conviene proteger el árbol después del trasplante durante un par de meses, situándolo en un lugar muy bien iluminado pero evitando las exposición directa al sol.
- Plagas y enfermedades:
- Pulgones, cochinillas y arañas rojas (ácaros) en ambientes cálidos y secos.
- Multiplicación:
- Se multiplica normalmente por semillas que sólo las producen los ejemplares adultos.
- El fruto una vez maduro comienza a abrirse. Las semillas se siembran directamente, sin tratamiento previo, y germinan con facilidad.
- El éxito en invernaderos comerciales es del 65% de germinaciones después de unos 20 días.
- No obstante, si queremos asegurar y acelerar la germinación podemos romper la dormancia sumergiendo las semillas en agua fría durante 24/48 horas antes de sembrarlas.
- Otra alternativa podría ser lijar un poco la cáscara de la semilla.
- Por esquejes leñosos (lignificados) de 20 a 30 cm a finales de otoño o principios de primavera, se suelen obtener buenos resultados.
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