sábado, 10 de noviembre de 2012
Bonsai Pimentero Japones
Anthoxylum piperitum- Pimentero japonés
- Descripción:
El Pimentero japonés es poco conocido en Occidente para los aficionados al bonsái.
- Arbusto caducifolio de pequeño tamaño y muy aromático.
- Tronco con la corteza rugosa de color claro y espinas en las ramas, generalmente en la base del nacimiento de las hojas.
- Hojas pinnadas, con número impar de folíolos ovalados y opuestos (7 a 11), alternas, de color verde oscuro, intenso y brillante, muy parecidas a las del fresno. En otoño se vuelven amarillas.
- Flores de color amarillo verdoso, muy pequeñas y aromáticas, con olor a fruta, situadas en las zonas axilares de las ramas nuevas que aparecen en primavera.
- Frutos pequeños, redondos y de color rosado o rojizo, comestibles y de sabor picante, con olor a cítricos.
- Luz:
- Exterior a pleno sol durante todo el año, pero evitando las exposiciones prolongadas durante la época más calurosa.
- Después del trasplante deberá situarse en un lugar muy bien iluminado pero sin sol directo para que pueda mantener las raíces con la tierra fresca.
- Puede aguantar la sombra parcial.
- La situación a pleno sol reduce el tamaño de sus hojas en combinación de la técnica del defoliado y el control de los nutrientes a través del abono.
- Temperaturas:
- Resiste el frío, pero en invierno es aconsejable protegerle del frío intenso, especialmente de las heladas fuertes y del viento frío. A un invernadero frío y volver al exterior lo antes posible cuando las condiciones lo permitan.
- Substrato:
- Una buena mezcla de substrato para el pimentero podría ser un 35% de arena de grano grueso o material equivalente (tierra volcánica, etc.) y 65% de mantillo.
- Riego:
- Los riegos deben ser a fondo hasta que salga agua por los agujeros de drenaje y cada vez que la superficie de la tierra comience a secarse, evitando el encharcamiento permanente de la tierra.
- No regar un árbol cultivado en el exterior después de una helada o cuando haya riesgo de heladas.
- Abonado:
- Abonar con frecuencia con un abono orgánico de calidad, especialmente durante la época de crecimiento, es decir, desde la primavera hasta el otoño.
- No abonar un árbol trasplantado, hay que esperar a que brote.
- Poda:
- La época más adecuada es entre la primavera y el final del verano, siendo lo recomendable dejar crecer las ramas nuevas del año durante todo el periodo vegetativo y acortarlas hasta 2 o 3 hojas durante el final del verano, así conseguiremos que las ramas y hojas maduren lo suficiente como para producir nuevas yemas.
- Como las hojas son alternas, debemos tener en cuenta la dirección que tenga la yema que nace de la primera hoja de la rama tras la poda, de tal forma que siempre podaremos por encima de una hoja que tenga una yema hacia el exterior de la copa.
- Eliminar todos los brotes de la base del tronco, ramas que se cruzan y las ramas muy verticales o hacia el interior.
- Hay que podar las raíces durante el trasplante pero no cortar demasiadas raíces finas para permitir que pueda recuperarlas durante el invierno.
- Entre la poda de ramas y el trasplante (o viceversa) debería existir un intervalo mínimo de tiempo para no acumular demasiadas operaciones agresivas a la vez, por ejemplo, 3 semanas.
- Trasplante:
- Cada 2 ó 3 años, al comienzo de la primavera, antes del engrosamiento de las yemas. En los ejemplares jóvenes puede aumentarse la periodicidad.
- Durante el trasplante conviene sanear bien cualquier parte de raíces podridas y podar las ramas no deseadas para reducir su copa.
- Si la poda de raíces es muy grande, convendría quitar hojas en la misma proporción que las raíces eliminadas.
- Es conveniente proteger el árbol después del trasplante durante un par de meses, situándolo en un lugar muy bien iluminado pero evitando la exposición directa al sol.
- Alambrado:
- La colocación de ramas mediante el alambrado puede realizarse entre la primavera y el otoño.
- Sus ramas son relativamente flexibles, pero conviene proteger la corteza del tronco y las ramas.
- Hay que vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen las ramas.
- Es recomendable no regar el día anterior al alambrado.
- Alambrar lo justo y sólo cuando otras técnicas de modelado no puedan utilizarse o no hayan conseguido los efectos deseados.
- Multiplicación:
- Por esquejes de raíz al final del invierno o por semillas durante el otoño.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario